miércoles, 29 de mayo de 2013

Escritura creativa:

El temible alienígena

PRIMER CAPÍTULO
Érase una vez, en un planeta muy lejano de la Tierra, había un pueblo habitado por alienígenas en las tierras de este planeta. Este mundo se llamaba Mercerio K y en él gobernaba uno de los extraterrestres más temibles de la galaxia, Roxolín Kerepín. Este bandido se aprovechaba de las riquezas de los demás y además el que tuviera valor de no hacerle caso pagaría por ello. Él, más o menos, era un dictador. Hacía lo que quería, cuando quería y donde quería. Atacaba a mundos y los conquistaba. Desde ahora, su objetivo era atacar y conquistar la Tierra.
¿Qué por qué quería atacar a la Tierra aunque Mercerio K estuviera a millones y millones de kilómetros? Pues por una buena razón, porque la Tierra era un mundo lleno de riquezas y de... Bueno, que no te quiero aburrir. Por tanto, el gobernador se llevó con él a todas sus tropas guerreras en varios cohetes y un poco más tarde, se dispuso a despegar. Tras largos años de espera; comiendo comida en polvo y sin poder asearse...
Llegaron a su destino, y con toda la fuerza del mundo Roxolín Kerepín gritó en alto: -¡Por fin!
Los seres humanos se quedaron asombrados pero a la vez pálidos por ¡ver a un extraterrestre, y además hablando! Al fin, las personas corrieron y corrieron sin pensamiento  porque no sabían si atacarlos, o llamar a la policía... Aterrizaron en Rusia, un país muy frío, o más bien, demasiado frío al clima que tenían en Mercerio K, pues la temperatura de su planeta era mucho pero mucho más caliente que la de la Tierra. Esta noticia llegó a las fuerzas de los rusos y al Presidente del Gobierno de Rusia: Vladimir Putin, que de un momento, se lo comunicaron.
La novedad fue increíble en las televisiones, porque la audiencia en todos los países y en todos los canales de todos los rincones del mundo era inverosímil. Solo se hablaba de este tema; que si cuándo nos atacarían, si decidían no atacarnos al final... Mientras que Rusia intentaba reflexionar y sin saber qué hacer, Roxolín Kerepín se instauró sus propias bases, o sea, cuevas en las que él y sus tropas hablaban y convivían.
Un día después, Kerepín y sus militares decidieron intentar dar un golpe de Estado. De un tirón, sacaron sus tanques, soldados, cañones... a la calle y se dispusieron a atacar. Cuando salieron a las calles, fueron dirigidos por Roxolín Kerepín hacia el Congreso de los Diputados. El ejército de Rusia se enteró de todo el tema y sacó los tanques y sus militares a las calles de la ciudad. Mientras que Kerepín y sus tropas iban directos hacia el Congreso de los Diputados, el ejército ruso siguió el mismo camino que el alienígena y al final, se encontraron.
Igor Krackov, general del ejército ruso, miró fijamente al extraterrestre y mientras que Krackov estaba distraído, Roxolín, de un solo cañonazo, destruyó a toda la tropa guerrera rusa. Los alienígenas sonrieron y se dijeron así mismos: - Ya lo hemos conseguido, si hemos derrotado a Rusia (el país más grande del mundo) en tan poco tiempo, vencer a los demás países estará chupado.
Muchos rusos, sobre todo ministros, científicos, abogados, geólogos, astrónomos, empresarios etc. emigraron a países lejanos de Rusia como: Argentina, Chile, Paraguay, Rumanía... por miedo de que les atacaran. Ya arrasada Rusia, su próximo objetivo era: el norte de Finlandia.
¿Qué por qué eligió Finlandia en concreto y sobre todo el norte?
Pues porque al dictador le encantaba el salmón, y en Mercerio K había poquísimo. Entonces él quería tener y comer todo el salmón que quisiera. En Finlandia el salmón era un manjar y además solo se pescaba en el norte. Aunque el alienígena no sabía algo muy importante que pasaba en el norte de este país, lo que pasaba es que se ¡moriría de frío! Haber si me explico bien, en Finlandia y sobre todo en el norte el salmón estaba delicioso, ¡pero hace el doble de frío que en Rusia!
Bueno, pues Roxolín y sus tropas militares viajaron a Turku, una ciudad situada justo en el norte del país, y allí se asentaron durante un buen tiempo. Más tarde, planearon atacar y hacer un atentado terrorista contra el monumento Polanski y dar otro golpe de Estado, pero ahora sería en el Congreso de los Diputados en Helsinki.

SEGUNDO CAPÍTULO
Como os iba diciendo en el anterior capítulo, el extraterrestre Roxolín Kerepín quería dar un golpe de Estado en el Congreso de los Diputados en Helsinki, capital de Finlandia y también hacer un atentado terrorista contra el monumento Polanski.
Lo mismo pasó inesperadamente en Italia, el hermano de Roxolín Kerepín, Frederick Thatum, viajó en un cohete desde Mercerio K a "La Toscana", o sea, a Florencia.
Frederick Thatum tenía envidia de su hermano, decía que Roxolín siempre lo había tenido todo y además siempre había sido el niño bueno de la familia, mientras que él siempre había sido el niño despreciado de la familia y el niño malo. Por eso, Frederick quería apoderarse de la Tierra y luego asesinar a su propio hermano.
Por tanto, Frederick se trajo de Mercerio K una arma potentísima, la Phoenix 3000, que de un solo disparo te convertirías en arena...



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